@|La reciente reunión de Ministros de Salud Pública de la región tiene una materia pendiente; y es no haber abordado el flagelo de la violencia, en especial de género y generaciones.

Al nivel que ha llegado se puede y debe tratar como una patología mental, en eso estaremos de acuerdo.

Se trata de abordarla con psiquiatras especializados y no con ideólogos que tendrán razón pero no han ayudado a mejorar una situación que ha sacrificado a mujeres y niños.