CON LOS HIJOS

La convivencia, encierro y preocupación que vivimos durante la pandemia llevó a distracciones y acciones involuntarias. Mezcla explosiva para accidentes domésticos.

Madres y padres cocinando distraídos, puertas que se cierran, vasos que se caen, niños que se golpean, alguien que improvisa armar cosas con herramientas sin protección.

La emergencia sanitaria terminó pero no así las eventuales cuarentenas, el teletrabajo y los niños más tiempo adentro por el frío.

Lo mejor que podemos hacer es:

* Dejar un espacio libre para que los niños puedan moverse, correr, jugar. Guardar adornos y muebles en otro lugar. 

* Guardar bien esos adornos. Los niños se convertirán en los mejores exploradores

* Usar herramientas siempre con cuidado y con adecuada protección. .

* Si el niño no lo sabe usar, no lo puede agarrar (cuchillo, vaso de vidrio, martillo...) .

* Cuidar el termo del mate, la taza de té, la puerta caliente del horno, y el agua de la caldera

* A la hora del baño, mamá llega cansada y los hijos hiperactivos. ¿Duchas cortas? ¿Baño liberador? Lo que a cada niño le sirva, pero que disminuya el riesgo de golpes. 

* Pensar en válvulas de escape para las mascotas, su comportamiento también cambió.

* Distraernos menos con el celular. .

* Compresión directa, con lo que tengas, sobre la herida que sangre. No torniquetes. 

* Agua corriente fresca en la quemadura .

* Frío local en el golpe .

* Paciencia. Por encima del griterío y del susto, paciencia y reevaluar.

* Llamar amigos médicos si no responde la emergencia móvil. .

Que la casa sea un refugio para todos. 

Lucía Torroba Werner

Especialista en Cirugía Pla?stica, Reparadora y Estética
Magíster en dirección de empresas de Salud
Migrante y mamá

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